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Editorial

El hinduismo: el humanismo original

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Un examen crítico del humanismo laico y del humanismo hindú para la juventud inmersa en el ateísmo académico de la universidad.

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Por Satgurú Bodhinatha Veylanswami

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imageLAS UNIVERSIDADES MODERNAS ESTÁN MOLDEANDO la mente de nuestra juventud en formas que los padres pueden no imaginar. Esto es porque la razón y la ciencia dominan el aprendizaje en las instituciones de educación superior, haciendo la religión a un lado; una estrategia académica comprensible pero limitativa. Aún si un profesor tiene fuertes convicciones religiosas personales, las reglas de la institución (con la notable excepción de las universidades religiosas) le impiden compartir con los estudiantes esas creencias, o sus implicaciones intelectuales. El resultado: se ha consagrado a los valores ateos / agnósticos del humanismo laico como los símbolos predeterminados de la educación convencional.

Muchos jóvenes hindúes dejan el hogar como buenos hindúes para ir a la universidad pero, después de estudiar las materias típicas a través de un sesgo antirreligioso, regresan con dudas sobre la existencia de Dios, los Dioses, los mundos internos, la vida después de la muerte y las enseñanzas místicas de la fe de sus padres. Tal y como lo hizo un joven recientemente, he escuchado a graduados universitarios explicar a sus padres: “En la escuela nos entrenan para seguir el método científico y a cuestionar todo. Ya no creo en Dios porque no hay prueba científica de la existencia de Dios”. Sumergidos en el ambiente universitario ateo, esta juventud básicamente se ha convertido del hinduismo al humanismo laico. Las universidades, al ser instituciones de igualdad de oportunidades, tienen el mismo efecto en los seguidores incautos de todas las religiones. Los estudiantes judíos regresan a casa más incrédulos, los católicos se vuelven más liberales y los musulmanes se convierten en extraños a su propia religión de nacimiento.

Hace casi tres décadas, Gurudeva se enfrentó a este problema. En respuesta, solicitó a sus swamis elaborar un resumen de las creencias de esta escuela de pensamiento junto con otros tres puntos de vista ateos (materialismo, existencialismo y comunismo). Publicó el resultado en “Danzando con Siva”. Se dio cuenta lo importante que era para los estudiantes el conocer los sistemas de creencias y doctrina del pensamiento occidental, ya que éstos permean y colorean la mayoría de las materias universitarias. Jóvenes y padres me han preguntado cómo pueden conciliar el hinduismo con el humanismo laico. Así que, en páginas posteriores, he preparado un contrapunto hindú para cada una de las nueve creencias del humanismo laico.

En su búsqueda de significado y valor en la vida, el humanismo laico (o simplemente Humanismo, el término en mayúscula que los seguidores prefieren) ve al mundo únicamente a través del lente de la razón y de la ciencia. También, sus conceptos de moralidad tienen una base puramente racional, no espiritual.

En 2002, la Unión Internacional Humanista y Ética publicó la Declaración de Amsterdam como el enunciado oficial de definición: “El humanismo es una postura de vida democrática y ética que afirma que los seres humanos tienen el derecho y la responsabilidad de darle significado y forma a sus propias vidas. Invita a la construcción de una sociedad más humana mediante una ética basada en los valores humanos y en otros valores naturales dentro del espíritu de la razón y la libre investigación a través de las capacidades humanas. No es teísta, y no acepta visiones sobrenaturales de la realidad.”

Para ayudar los estudiantes hindúes a hacer frente a la abrumadora influencia del humanismo laico, sugiero que el Hinduismo es la filosofía original y más humanística de todas. Tiene todo lo que tiene el humanismo y más.

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SHUTTERSTOCK

Pondering issues: A college student is musing over the subjects his professor is presenting, most of which reflect Western views of reality. His challenge is to discover how they connect to his Hindu upbringing.
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Un concepto central del humanismo se expresa en su tercera creencia: “Creo en la preservación y mejoramiento de la especia humana como mi preocupación última, y en la familia humana global, la cual debe preservar la Tierra para las futuras generaciones”.

El hinduismo no tiene ningún problema en respaldar esa convicción. La diferencia consiste en la pregunta: “¿Qué aspectos de la condición humana deben mejorarse y cómo?”. El hinduismo acepta los valores humanistas laicos expresados anteriormente y agrega lo que considera el propósito esencial de la vida humana: el progreso espiritual, el acercarse cada vez más a Dios (lo que para los monistas es lo más íntimo de uno, el ser Divino) en el transcurso de varias vidas.

El hinduismo aborda el avance de la humanidad en el contexto de su divinidad, y de hecho en la divinidad de todas las cosas, incluyendo el universo material. Un hindú señalaría que la física cuántica revela que el universo en sí es sobrenatural y consciente, un concepto descrito a profundidad en nuestras escrituras milenarias.

Mientras que el humanismo laico aboga noblemente por el servicio al prójimo, el humanismo hindú espiritualiza el servicio desinteresado en la forma del karma yoga, transformando nuestro trabajo y todas nuestras actividades en culto y, de esta manera, acercándonos a la comprensión de nuestra unión innata con Dios. Pramukh Swami Maharaj de BAPS aconsejó a sus seguidores después del terremoto de Gujarat de 2001: “Cuando la gente está enfrentando dificultades y penas, nuestra tradición india es el ofrecerles consuelo. Sentimos que al servir a los seres humanos servimos al Señor mismo”.

Idealmente, tanto los padres como los maestros del templo, enseñan a los adolescentes hindúes el enfoque hindú de rendir culto a Dios a través del servicio. También, es importante para estos adolescentes el tener la experiencia de participar, de manera regular, en proyectos de servicio. Afortunadamente, varios templos organizan tales proyectos de servicios. Si no hay proyectos hindúes en tu área entonces expande tu búsqueda a la comunidad en general para actividades relacionadas con mejorar el medio ambiente, apoyo en casos de desastres, proveer ropa, comida y cuidado para los necesitados.

¿Cuáles son algunas de las otras diferencias claves entre estas dos formas de humanismo? Mientras que el humanismo laico glorifica a la razón como reina, el hinduismo sabe que es sólo una fuente de conocimiento. Lo que el primero censura como superstición, el último venera como experiencia mística. Mientras que el humanismo secular dice que no hay vida después de la muerte, el hindú cree que todas y cada una de las almas emprende varias vidas en este planeta. Entiende la sabiduría de este ciclo de nacimiento, muerte y renacimiento; y busca el hacerlo lo suficientemente bien en esta vida para ganarse la entrada a una familia magnánima en la siguiente. El conocimiento de la reencarnación elimina el miedo a la muerte y, unido a la ley del karma, explica la diversidad de la experiencia humana. En un giro irónico, las actuales fronteras de la ciencia universitaria, no la vieja escuela, están profundamente sumergidas en los estudios de la conciencia no local (léase el alma y la reencarnación), el no materialismo del cosmos (lo consentido de la física cuántica) y la conciencia en las plantas e incluso en la materia inerte. Así, que dentro de un siglo parte de este conflicto podría ser abierto a debate.

Gurudeva habló sobre como el hinduismo “saca a la luz los sentimientos maravillosos de una creencia en los procesos cósmicos de reencarnación, aunado con el conocimiento de las leyes del karma y la sabiduría del dharma en la que cada uno tiene su justo lugar y propósito en la vida. Trae consigo la apertura de aceptación total de todas las religiones como expresiones de la creación de Dios, la bendición de un camino devocional completo que gira alrededor de poderosos templos, la satisfacción de una enseñanza mística profunda fundada en el yoga y traído por los videntes, santos y gurús, y mucho más. Nuestra religión es fuerte, tan rica y variada que muy pocos pueden decir que la entienden en su totalidad. Es inmensa, una religión inmensa, tan inmensa que a veces se nos dificulta explicarla a aquellos que creen en una doctrina más simple”.

Con su comprensión del funcionamiento de los tres mundos, los hindúes también tienen la dicha del peregrinaje, en el que hacen a un lado las preocupaciones mundanas y viajan a lugares sagrados en momentos auspiciosos para obtener bendiciones especiales. Gurudeva explicaba: “A diferencia de los orgullosos ´libres pensadores´quienes se consideran a sí mismos emancipados, por encima de la vida religiosa, nosotros los hindúes sentimos que el recibir el darshan de los Dioses, y la ayuda que viene en ello, vigoriza nuestro ser y nos inspira a ser aún más diligentes en nuestra vida espiritual. A diferencia de los racionalistas que se sienten confiados en que dentro de ellos yacen todos los recursos para satisfacer todas las necesidades, y que el orar a los Dioses para solicitar ayuda es un ejercicio patético en inutilidad; el hindú sabiamente se somete a lo divino y evita así el abismo del escepticismo”.

Luego está la dicha del misticismo. Como Gurudeva lo expresaba: “Que tan grande es la tradición mística hindú, con sus sadhanas y yogas, con su riqueza de entendimiento de los cuerpos etéricos, de los nadis y los chakras, del aura y los pranas, de los varios estados de conciencia y niveles de existencia, y mucho más”.

Los jóvenes hindúes que van a la universidad deben estar preparados para sumergirse en el mundo académico, donde la razón es la reina, como una restricción temporal de la conciencia para obtener las lecciones que los cursos ofrecen, no para convertirse al camino de escepticismo y la duda. Le aconsejo a la juventud el tener en cuenta que muchos académicos están dedicados a convencer a los teístas que están en un camino ignorante, y a convencer a los hindúes que nuestra religión es cruda, obsoleta y está llena de superstición. Les insto a continuar sus prácticas espirituales en la escuela, incluyendo puja, japa, yoga, meditación y el estudio de las escrituras; y el buscar graduarse como un gran estudiante que aún es un buen hindú.

 

9 creencias del humanismo laico y su contraparte hindú
Estas nuevas creencias, tomadas de “Danzando con Siva: El catecismo contemporáneo del hinduismo,” resume la visión del mundo del humanismo laico. Para cada creencia humanista ofrecemos una contraparte hindú.

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9 creencias del humanismo laico…

1 Rechazo del teísmo Creo en el no teísmo, al no haber una prueba racional de la existencia de Dios; y no me engaño a mi mismo con pensamientos de un Ser Supremo.
2 Rechazo de la religión y de la superstición Creo que las religiones tradicionales y fes predican doctrinas falsas, son opresivas y llevan a sus seguidores hacia la ignorancia, intolerancia y el dogmatismo. Y que es mi deber el ser activamente escéptico y desafiar las ilusiones de las religiones ortodoxas y todos los intentos de explicar el mundo en términos sobrenaturales.
3 Impulsar a la humanidad Creo en la preservación y mejoramiento de las especie humana como mi preocupación última y en la familia humana universal que debe preservar la tierra para generaciones futuras a través del desarrollo de una moralidad planetaria, laica y un sistema de ley.
4 Ser bueno sin un Dios Creo que el vivir una vida buena, moral es el mejor medio para la felicidad individual y colectiva y que la moralidad tiene una base racional, secular.
5 Proteger los derechos humanos Creo en extender los derechos humanos y la libertad intelectual y moral; y en una democracia laica, con una separación estricta de la iglesia y el estado, como un medio para eliminar la discriminación y para lograr la igualdad y justicia para todos.
6 Educación y libre indagación Creo en el desarrollo del potencial creativo humano a través de la educación en las artes y en las ciencias y en la suprema importancia de la libre indagación en una sociedad abierta, pluralista, universalista.
7 Confiar únicamente en la razón Creo en la aplicación y desarrollo de la razón y de la ciencia moderna como la forma más alta de entender el universo, resolver los problemas humanos y permitir a cada individua desarrollar su máximo potencial.
8 Centrarse en esta vida, incredulidad en la vida después de la muerte Creo en la búsqueda de la satisfacción y felicidad en esta vida y rechazo todas las nociones de reencarnación y de vida después de la muerte como falsas y sin base. Busco mi máxima capacidad como un ser humano aquí y ahora, sirviendo a otros y creando un mundo mejor y más justo.
9 Creacionismo científico Creo en la teoría de evolución de Darwin como un hecho científico y en el naturalismo, sosteniendo que el mundo conocido es todo lo que existe y que no hay una creación, control o significado sobrenatural o espiritual.

y su contraparte hindú

1 Fuerte fe en Dios Creo en un Ser Supremo, omnipresente que es tanto inmanente como trascendente, Creador y Realidad No Manifiesta. Las grandes almas han dado testimonios de sus experiencias personales de Dios, cuya existencia es afirmada por las escrituras.
2 Respeto hacia todas las religiones Creo que las religiones del mundo están basadas en experiencias trascendentales válidas de lo divino. Creo que ninguna religión particular enseña el camino único hacia la salvación mejor que otras. Sino que todos los caminos religiosos genuinos son facetas del amor puro y luz de Dios, que merecen tolerancia y comprensión.
3 Lo santidad de Todo Creo en la santidad de la vida, lo que incluye al vasto cosmos en todas sus manifestaciones y, por lo tanto, en la preservación de la tierra y todas sus especies. Y en el valor de las luminarias espirituales que trabajan y aconsejan a los líderes laicos en asuntos del gobierno.
4 Guiado hacia la bondad por Dios Creo que la vida moral, religiosa es esencial para la más alta forma de bienestar individual y comunitario. Los principios buenos y éticos tienen sus raíces en el suelo de la fe, la experiencia espiritual, los textos sagrados y la sabiduría cultural.
5 Guardar todos los derechos humanos Creo en el balance de derechos humanos y responsabilidades, en la necesidad de la libertad religiosa e intelectual equitativa para los seguidores de todas las fes y que los principios hindúes espirituales, ejercidos correctamente, eliminarán la discriminación y traerán igualdad y justicia para todos.
6 Conocimiento y libertad Creo que hay una reserva profunda de karma humano y capacidad que da lugar a la creatividad, arte, ciencia y de hecho a todas las formas de conocimiento; y que las personas desarrollarán mejor éstas cuando se les da irrestricta libertad de pensamiento y de investigación.
7 Confiar en la razón y el superconsciente Creo que una comprensión completa del universo requiere la sociedad de la superconciencia y la tradición religiosa con la razón y la ciencia; y que no hay un conflicto inherente entre las dos.
8 Creencia en la reencarnación Creo en la reencarnación; que el alma, la conciencia, es no local y sobrevive a la muerte física. No obstante, es inútil obsesionarse en las vidas pasadas o futuras y es sabio el vivir esta vida al máximo en el ahora, cumpliendo el dharama para que podamos lograr nuestro más alto propósito en nacimientos futuros.
9 Los descubrimientos de la ciencia moderna Creo que lo natural y sobrenatural forman una realidad, que la ciencia es sólo una medida del cosmos y, que de hecho, la física cuántica está descubriendo la realidad de las dimensiones no materiales y afirmando la declaración hindú de una conciencia unitiva que impregna al universo.